El efecto de las redes sociales en la autoestima. Cómo las imágenes curadas impactan la percepción propia

Hoy en día, las redes sociales como Instagram y TikTok forman parte de nuestra rutina diaria. Nos permiten conectarnos, inspirarnos y entretenernos. Sin embargo, también pueden tener un lado menos positivo, especialmente cuando se trata de nuestra autoestima. Muchas de las imágenes y videos que vemos en estas plataformas están cuidadosamente seleccionados y editados, lo que puede generar expectativas poco realistas sobre cómo deberíamos vernos o vivir nuestra vida.
Comparaciones que Dañan
Es común que las personas compartan en redes sociales solo los momentos más felices o las fotos más atractivas. Desde cuerpos "perfectos" hasta vacaciones soñadas, el contenido suele mostrar una versión idealizada de la vida. Esto puede llevarnos a compararnos constantemente, pensando que no somos lo suficientemente buenos o que nuestra vida no está a la altura.
Estudios han demostrado que esta comparación constante puede afectar la autoestima, especialmente en los jóvenes. Ver imágenes "curadas" puede hacernos sentir inseguros sobre nuestra apariencia física o logros, generando ansiedad y tristeza. Lo más preocupante es que, muchas veces, olvidamos que esas imágenes no siempre reflejan la realidad. Fotos retocadas, filtros y ángulos cuidadosamente elegidos son solo parte del proceso para crear estas publicaciones "perfectas".
Consejos para Usar las Redes Sociales de Forma Saludable
Aunque las redes sociales tienen sus riesgos, también pueden ser una herramienta positiva si aprendemos a usarlas con moderación y conciencia. Aquí hay algunos consejos prácticos para cuidar tu bienestar mientras disfrutas del contenido digital:
Sigue cuentas que te inspiren y te hagan sentir bien: Llena tu feed de contenido que te motive y no que te haga dudar de tu valor. Puede ser de cuentas educativas, creativas o de personas que promuevan la aceptación y el amor propio.
Recuerda que no todo es lo que parece: Sé crítico con lo que ves. La mayoría de las personas no publican sus luchas o momentos difíciles, así que no compares tu realidad con la versión editada de alguien más.
Establece límites de tiempo: Usa herramientas como temporizadores en tu teléfono para limitar el tiempo que pasas en redes sociales. Esto puede ayudarte a enfocarte en otras actividades que te hagan sentir bien, como leer, ejercitarte o pasar tiempo con amigos y familia.
Haz una pausa cuando te sientas abrumado: Si notas que las redes sociales están afectando tu estado de ánimo, toma un descanso. Incluso un día sin conectarte puede hacer una gran diferencia.
Practica el agradecimiento: En lugar de enfocarte en lo que te falta, dedica tiempo a reflexionar sobre lo que ya tienes y aprecias en tu vida.
Historias de Cambio Positivo
Muchas personas han decidido tomar un enfoque más saludable hacia las redes sociales, y los resultados han sido transformadores. Por ejemplo, Marta, una estudiante universitaria, notó que pasaba horas comparándose con influencers en Instagram. Decidió dejar de seguir cuentas que la hacían sentir insegura y comenzó a usar la plataforma para aprender sobre temas que le interesaban, como arte y cocina. Con el tiempo, su autoestima mejoró, y ahora usa Instagram de una manera que aporta valor a su vida.
Como Marta, todos podemos hacer pequeños cambios para proteger nuestra autoestima mientras usamos las redes sociales. Al final, lo más importante es recordar que somos mucho más que una foto o un video, y que nuestra vida no necesita filtros para ser valiosa. Adriana Tejera